Cada prueba tiene un carácter y
marchamo característico, el cual puede o no gustar, pero obviamente será el que
influya a la hora de tomar la decisión de volver. Eso nos llevo a decidir
volver a tierras Palentinas para disfrutar de nuevo de este rallye, de sus paisajes
y como no de sus gentes.
Si algo nos llamo poderosamente
la atención el año pasado, fue la calurosa acogida que las gentes de esta
tierra brindaban a nuestro paso por las distintas localidades. Los vítores y
aplausos a nuestro paso, hacían poner los pelos como escarpias y sentir un
escalofrió por la espalda, cual descarga eléctrica, que producía la agradable
sensación de ser importante por un día.
Si en la pasada edición el equipo
del curso de iniciación formado por Janire y Jonan se animaron a inscribirse, experiencia
que no podían repetir muy a su pesar, en esta edición los chicos del Max
Racing, Iñaki y Oscar, eran quienes se animaban en su segunda prueba, tras la
agridulce toma de contacto con este mundillo en la Ronda Hotel Olimpo. Como
adelanto comentar que esta vez sí pudieron disfrutar de un rallye de
regularidad, consiguiendo terminar la prueba sin averías y con mínimos
despistes, los cuales desaparecieron en la segunda mitad de la prueba.
Era difícil imaginarse como poder
meter la temeraria cifra de casi 90 coches en aquella plaza de Cervera de
Pisuerga, pero se consiguió y tras la colocación de todos los vehículos,
seguido del correspondiente breifing, sobre las 12:30 del mediodía comenzó el
bullicio de motores cuales bíblicas trompetas a las puertas de Jericó.
El segundo era un largo tramo con 20 controles, cuyos últimos 10km se hacían en ida y vuelta. Volvimos a tener problemas con tráfico, ocasionando otro pequeño goteo de segundos, pero esta vez se minimizo más y en las zonas con menos tráfico rodamos muy finos. A pesar del tráfico y de la cantidad de controles existentes nuestra penalización se acercaba a las mejores del tramo y adelantábamos 33 posiciones en la general.
El tercer y cuarto tramos no
entrañaban mayor dificultad y volvíamos a conseguir adelantar un puesto más en
la clasificación.
La tarde trascurrió para nosotros
de una forma más normalizada pero todos los participantes afinaban mucho mas,
lo cual ponía muy cara cualquier intención de remontar puestos. Por nuestra
parte empeño le pusimos siendo decisión clara hacerlo lo mejor posible, al
menos en parte lo conseguimos bajando la media de penalizaciones de un 6,4
segundo por control a un 2,2 segundos. En ese empeño conseguimos terminar 5 de
los 9 tramos con menos de 5 segundos de penalización e incluso un tercer puesto
en el 11º tramo. Una pena los 23 segundos de penalización en el 12º tramos al
deber circular tras un vehículo que no facilitaba el adelantamiento, es lo que
tiene este tipo de pruebas.
En general nuestros compañeros Iñaki y Oscar consiguieron finalizar en esta su segunda participación, lo cual les ha inyectado un poco mas de moral, muy tocada desde su participación en el Rallye del Olimpo. Utilizaron una técnica por la tarde que les fue medianamente bien, pero que no es factible en todos los casos, mantener la distancia con el predecesor. En esta prueba era posible pues salíamos cada 30 segundos y la distancia con el predecesor era visible en ciertos casos, no es una técnica para conseguir hacerlo bien pero buena para aprender a navegar olvidando el agobio de seguir la media.
Un agradable fin de semana el que pasamos en compañía de nuestra gente, Joserra, Amaia, Elena y Ander, además de nuestros ya mencionados compañeros Oscar e Iñaki, de un no menos agradable ambiente de rallye y de un inmejorable paraje, en definitiva una prueba fácilmente recomendable.
Fotografías José Ramón Darriba.