Tras realizar el cambio del cuadro, se montan un relé de intermitencias que habíamos comprado. Al ver el repuesto nos temíamos que no valiera, no era igual al original, pero tras probarlo suena un enérgico suspiro de alivio, algo de suerte teníamos que tener.
El volante esta muy trillado, en un desguace se compra uno del 80 Coupe y al ir a montar el contacto de la bocina esta invertido. En el nuestro lleva el disco el volante y en el otro lleva el contacto. Tras acordarme de toda mi anterior generación, otra vez interviene el intelecto privilejiado de mi Navegante, descubre que el soporte de aro se puede sacar. Cambiamos los soportes de uno a otro volante y "vuala" caso resuelto.
Ya tenemos el interior mas o menos resuelto. Tenemos un par de cositas que, de momento, no sabemos como solucionar, pero son pequeñas cosas y todo se hará.
Pasamos de nuevo a una de las puertas, concretamente la del piloto. El bombín de apertura de cerradura no va muy católico y al girar no nos gusta el tacto. Nada, desmontamos el panel de puerta y manos a la obra. Se desmonta el varillaje y comprobamos que esta muy oxidado, se lija bien, se da una buena capa de lubricante y se monta. Ahora va de cine, la otra puerta queda pendiente de hacer lo mismo.
Al desmontar el panel, no damos cuenta que la tapicería del panel esta muy sucia, se intenta limpiar pero con los medios a nuestro alcance, ni "patras". Se compra texafilm de terciopelo rojo para hacer una prueba y a nuestro gusto queda bien que para eso se inventaron los colores. Nada, cuando tengamos el coche habrá que que comprar tela de tapicería, cortar a medida e implicar a la Señora Mariasun que nos haga unos remates.
No sin cierto miedo una vez de montado el coche, pasamos la ITV que teníamos caducada de unos meses. Arrancamos y dejamos que caliente bien mientras recogemos y limpiamos la zona donde había estado parado todo este tiempo. Al ir a coger el coche ¡MIERDA! tenemos ligeras perdidas de gasolina por la canalización de salida de la bomba. No hay tiempo vamos a la ITV con los .......... de corbata. Pagamos los aranceles debidos y con los cuarenta dedos cruzados nos acercamos a la cueva. No toca un chico joven, bueno, parece simpático. Al acercarnos a coger la documentación le pedimos que sea benevolente con el ancianito. No hizo falta, pasa la ITV sin pega ninguna, bueno, parece que no vio las perdidas de orina.
En estos momentos blanquito esta en situación de revisión mecánica. Se han comprado unas llantas nuevas que pintaremos de blanco y estamos a la busqueda de un taller de chapa que nos deje el coche asi:
Tras las dos anteriores fases en las que nuestra montura había sido restaurada en varios de sus puntos débiles, llegan las fases finales de terminado. Como podéis apreciar en esta primera foto, el proceso ya esta en fase de pintura.
